Nadie está exento de ser asaltado. Y aunque la atención debería ir enfocada a quienes se creen con el derecho de atacar, nunca está de más conocer algunas medidas de seguridad en la calle que pueden ser útiles para prevenir una agresión.
Consejos de seguridad en la calle
Quizás te parezca que los robos y las agresiones son aleatorias. Sin embargo, quienes atacan suelen buscar unas características determinadas en la víctima o un comportamiento que les sirva de oportunidad. Con estos sencillos consejos de seguridad en la calle, lograrás resultar menos vulnerable. ¡La prevención es tu mejor arma!
Evitar llevar objetos de gran valor encima
Si sabes que para la ida o la vuelta tendrás que andar a pie, te recomendamos que lleves contigo solo lo necesario. Esto implica ir con el dinero justo o dejar en casa joyas o relojes valiosos y llamativos. Si vas con bolso, llévalo cruzado por el pecho y no en un hombro, ya que la agresión más común es tirar de este. También es eficaz no guardar todo en el mismo sitio, sino guardar las pertenencias en los bolsillos. Pero ya se trate de estos, del bolso o de una mochila, búscalos siempre con cierres.
Busca zonas transitadas y con iluminación
Aunque implique un recorrido un poco más largo, si quieres aumentar tu seguridad en la calle debes transitar áreas bien iluminadas y en las que haya gente. En el caso de que debas atravesar una zona que no conoces, utiliza el transporte público o un taxi en su defecto.
Mantén distancia con desconocidos
Una agresión sexual sí requiere de contacto cercano, pero el robo de una cartera puede llevarse a cabo de la forma menos pensada. Por ejemplo, espectáculos en la calle, aglomeraciones o hasta a través de alguien que finge encontrarse mal. Mientras estás distraído/a, alguien puede introducir la mano en tu bolso o en tu chaqueta y llevarse tus pertenencias.
¿Y cómo evitarlo? Pues combinando las precauciones anteriores sobre tus objetos de valor con la desconfianza hacia todo lo que suceda a tu alrededor. No se trata de ir huyendo, sino de sujetar bien el bolso o colocarse la mochila por delante, proteger los bolsillos o avisar a un teléfono de emergencia si alguien parece necesitar ayuda.
Aprende a defenderte
A veces todas las precauciones que se puedan tomar relativas a la seguridad en la calle no son suficientes para evitar una agresión. En este punto, lo único que nos queda es saber defendernos. Una opción es formarse en artes marciales, pero si prefieres conocer técnicas que sean eficaces, fáciles de ejecutar y que puedas aprender con mayor rapidez, la defensa personal es la clave.
En estas clases, no solo se trabajan los movimientos que nos ayudan a liberarnos, sino que se interpretan distintas situaciones en las que alguien, sobre todo las mujeres por su mayor vulnerabilidad, se puede ver implicado.
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