Para practicar artes marciales y progresar, se necesitan diferentes habilidades; por ejemplo, ser flexibles. Hoy te traemos algunos consejos para mejorar tu flexibilidad.
¿Por qué necesitas ser flexible en las artes marciales?
Si hay algo que caracteriza a las artes marciales es la agilidad que muestran quienes practican estas disciplinas. Movimientos rápidos y complejos que se realizan con gran precisión y técnicas que revelan constancia para desarrollar las aptitudes físicas.
Sin embargo, para poder desarrollar esa agilidad, es necesario mejorar la flexibilidad junto con los entrenamientos técnicos. ¿Y por qué es tan importante? Pues porque es la que permite realizar movimientos amplios, en particular con las piernas en las patadas altas. Pero también en los bloqueos y en los giros.
Además, cuando somos flexibles se reduce el riesgo de sufrir una lesión, puesto que el cuerpo se puede adaptar en mayor medida a los movimientos repentinos o que son poco habituales. Pero no se trata solo de que no nos demos un tirón, sino que de que la propia capacidad de recuperación se ve reducida.
Por otra parte, mejorar la flexibilidad equivale también a tener más fluidez a la hora de hacer transiciones entre las posturas. En concreto, cuando se trata de disciplinas como el taekwondo, el kung-fu o el jiu-jitsu. Sin ella, la técnica se puede ver limitada, y en consecuencia el rendimiento.
Consejos para mejorar tu flexibilidad
Estiramientos dinámicos y estáticos
Los estiramientos son una de las formas más eficaces de mejorar tu flexibilidad. Dispones de dos opciones; los dinámicos y los estáticos. Los primeros consisten en ejercicios en movimiento, como los círculos de brazos o los balanceos de piernas. En la actualidad, se suelen usar como parte del calentamiento previo. En cuanto a los estáticos, son por ejemplo el split o los estiramientos clásicos de cuádriceps. Son más adecuados para enfriar.
Yoga y pilates
Practicar artes marciales es compatible con otras actividades físicas. El yoga o el pilates son perfectas, puesto que además de trabajar la flexibilidad, mejoran el equilibrio y la fuerza abdominal. Algunas posturas como el perro invertido o el guerrero favorecen la apertura de cadera, que te ayudará a tener mayor amplitud de movimiento. Y puesto que se trabaja el cuerpo en sintonía con la respiración, se incrementa la resistencia.
Ejercicios específicos de cada disciplina
Cada arte marcial realiza unos movimientos característicos, que requieren de flexibilidad en determinadas zonas del cuerpo. Por ejemplo, en taekwondo se dan patadas altas que exigen flexibilidad en los isquiotibiales. Pero en jiu-jitsu, es más importante la apertura de cadera. Por tanto, enfócate en lo que necesites para tu disciplina.
Constancia
Igual que se necesita tiempo y práctica en las artes marciales, para mejorar tu flexibilidad también hace falta paciencia. El cuerpo va cediendo gradualmente y forzarse solo puede llevar a una lesión. Para progresar de forma controlada, te sugerimos las bandas elásticas.
Trabaja la movilidad articular
La movilidad articular mejora el rango de movimiento de las articulaciones, y por eso se suele combinar con la flexibilidad. Ejemplos conocidos son las rotaciones de cuello, cadera y muñecas. No solo evitan la rigidez, sino que facilitan la fluidez y la resistencia.
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