Como cada año, se acerca la fecha del Día del Padre: el 19 de marzo. Un día para homenajear a aquellos padres que se implican en la crianza y el cuidado de los hijos durante sus vidas. Desde Warriors Barcelona te propones un regalo diferente: clases de defensa personal. ¡Porque son una excelente forma de mantenerse en forma y de ganar seguridad!
Una fecha para demostrar cuánto nos importan
El Día del Padre se ha convertido en una tradición y, como sucede con este tipo de fechas, multitud de empresas aprovechan para promocionar sus productos y que hagamos un desembolso en algo que acabará olvidado en un estante.
La idea de celebrar esta fecha es la de demostrar cuánto nos importan o una forma de agradecimiento por seguir ahí para nosotros en las buenas y en las malas. Pero, ¿consigue una colonia o un reloj ese objetivo?
Por eso, desde Warriors Barcelona apostamos por regalar algo que sea útil y que de verdad suponga un beneficio para quien lo recibe. Con las clases de defensa personal, nuestros progenitores harán frente al paso del tiempo con un deporte que trabaja todos los grupos musculares de una forma muy entretenida y que, además, les dará confianza en sí mismos. ¡Es hora de sacar al guerrero que llevan dentro!
¿Por qué apostar por las clases de defensa personal?
Quizás no tengas claro si las clases de defensa personal sean lo que necesitas para el Día del Padre, así que hemos preparado algunos de los beneficios que se obtienen al apostar por este tipo de entrenamiento.
Fortalecimiento del corazón
El ejercicio cardiovascular nos protege de futuros males, y en particular de aquellos que afectan al corazón. La presión alta es uno de los problemas más habituales a medida que pasan los años y con este tipo de entrenamiento que alterna los movimientos intensos con los descansos, se consigue incrementar la capacidad pulmonar y reducir el ritmo cardíaco.
Mantiene la masa muscular
Tendemos a pensar que durante la juventud somos inmunes a todo mal, pero te sorprenderá saber que la pérdida de tejido magro se inicia a los 30, con un porcentaje entre el 3% y el 5%, y que luego se acelera a partir de los 50 años. Por tanto, la inactividad puede pasar factura antes de lo que pensamos. Con las clases de defensa personal se tonifica el cuerpo e incluso se puede desarrollar masa muscular, que a su vez, reduce el riesgo de osteoporosis.
Aumento de la coordinación
La pérdida de agilidad y de reflejos también avanza con el paso del tiempo. En las clases de defensa personal se aprende a esquivar golpes y agarres y a responder a estos con rapidez. Lo que significa que se trabaja la coordinación y la velocidad.
Mayor autoestima
Uno de los beneficios generales de cualquier entrenamiento es que incrementamos nuestra fuerza, algo que de manera inmediata nos hace sentir más confianza en nosotros mismos y en nuestras capacidades. Aunque nadie pasa los días pensando en si será atacado por un desconocido, esta simple sensación de control es ya beneficiosa por sí misma. Y por si fuera poco, al ser ejercicio físico segregamos hormonas como las endorfinas que nos ayudarán a sentirnos más felices.
Si quieres regalar todos estos beneficios por el Día del padre, ¡reserva ya una clase de defensa personal de prueba con nosotros!