Recuperar la rutina es importante, y no solo porque tu cuerpo te pida un poco de ejercicio después del descanso de las vacaciones. Ya hablamos sobre cómo volver al ejercicio tras el descanso estival, pero ¿sabes por qué es bueno hacerlo? Te contamos cuáles son esos motivos y cómo hacer que trabajen a tu favor para recuperar el hábito de entrenar.
Primera clave: Recuperar la rutina de ejercicio por placer
La vuelta al cole no siempre es un lecho de rosas. En realidad, lo más común es que nos cueste retomar el hábito de madrugar, que no queramos verle la cara al jefe o a los clientes… Pero nuestra rutina deportiva puede ayudarnos a mitigar la parte más negativa de todo ello. El deporte nos permite deshacernos del estrés y además libera endorfinas. Así que ir a entrenar los primeros días de vuelta al trabajo nos procurará un poco de esa felicidad que tanto relacionamos con un tiempo cercano pero ya pasado: el maravilloso verano.
Segunda clave: Cuando haces ejercicio tú tienes todo el control
Uno de los motivos por los que no nos gusta regresar al trabajo es porque, en mayor o menos medida, todos debemos volver a aceptar órdenes. Y esto resulta duro tras unas semanas de libertad total. Pero recuperar la rutina de entrenamiento hace que, durante algunas horas a la semana, sigamos siendo los dueños absolutos de nuestro cuerpo. Ver cómo los músculos se coordinan con el cerebro y siguen nuestras órdenes y las de nadie más nos devuelve un sentido de la autonomía muy preciado.
Tercera clave: Reaprópiate de tus patrones de sueño
Si has pasado un periodo largo de vacaciones, es posible que estés sufriendo para reajustar tu horario nocturno. Nada mejor para dormir cuando debes hacerlo que retomar tu rutina deportiva. Se habla mucho de cómo la disciplina ayuda a los más pequeños, pero también es importante para los adultos.
Cuarta clave: Recuperar la rutina para recuperar la energía
¿Conoces la Primera Ley de Newton? Según esta ley, un objeto en reposo tiende a permanecer en reposo o, si está en movimiento, tiende a permanecer en movimiento a menos que una fuerza externa actúe sobre él.
Pues bien, si aplicamos esto al ejercicio, tenemos que, para que el cansancio que suele presentarse tras las vacaciones no se apodere de nosotros más tiempo del estrictamente necesario, lo ideal es retomar una rutina que nos mantenga activos.
Quinta clave: septiembre es el mejor momento
Los días todavía son relativamente largos y te dará menos pereza ir al gimnasio que si esperas a octubre o noviembre. Tras el cambio de hora, tendemos a meternos en casa temprano y aprovechamos peor nuestro tiempo. Por no hablar de que, cuanto más tardes en crear hábitos por tu propia voluntad, más fácil será que caigas en hábitos de los que preferirías evitar.
Así que, si quieres recuperar tus niveles de actividad previos al verano, recuperar la energía, el control sobre tu vida, dormir mejor y sentirte más a gusto ¡únete a WARRIORS BARCELONA en septiembre!